Cuando
tenemos problemas, cuando estamos en peligro, en aflicciones,
temerosos y no encontramos salida , hay un lugar que Dios quiere que
tomemos y que sea nuestro refugio y es bajo la sombra protectora de sus
alas. Corramos a Él, no hay otro lugar de refugio donde podamos estar a
salvo, donde podamos estar tranquilos y confiados. Dios nos ha dejado
su Palabra y si creemos en ella, sus promesas se hacen realidad en
nuestras vidas; por eso el salmo 91:1 nos afirma: “ EL que habita al abrigo del Altísimo, Morará bajo la sombra del Omnipotente.”
Dios es el Altísimo, el Omnipotente está por sobre todas las cosas.
Necesitamos depender de Dios y confiar en Él completamente.
Nadie nos puede tocar si no tiene el permiso de Dios, si estamos bajo sus alas.
Debemos de enfrentar nuestros temores con la Palabra de Dios, porque
por sobre todas las cosas está el Altísimo que es nuestra cobertura y
protección y poner toda nuestra confianza en El. Dejemos que el mensaje
de este salmo penetre en lo mas profundo de nuestro ser y que
destierre todo temor y toda angustia que hay en nuestros corazones.
Vamos a leerlo creyendo con todo nuestro corazon con voz firme, como un
ejército que está declarando la verdad de Dios contra las mentiras del
enemigo. "EL que habita al abrigo del Altísimo, Morará bajo la sombra del Omnipotente". El Dios Omnipotente es nuestro refugio eterno. El Dios Todopoderoso es nuestra protección. Amen.